Transformación digital: los retos de adaptarse a un escenario en cambio continuo

14 / 03 / 2019

Las tecnologías digitales están transformando radicalmente todos los ámbitos. modificando de esta manera los hábitos de consumo.

El código binario y su compás de unos y ceros está propiciando un cambio de paradigma que se caracteriza por la gran velocidad a la que se producen las transformaciones. Es un escenario que presenta múltiples desafíos, pero también ofrece nuevas oportunidades que las empresas pueden aprovechar no solo para incorporar soluciones tecnológicamente avanzadas a sus sistemas productivos, sino también para emprender un cambio cultural dentro de su propia estructura que permita construir organizaciones más flexibles y eficientes, creando nuevos modelos de negocio y transformando drásticamente los ya existentes, cada vez más orientados a dar respuesta pronta y oportuna a las necesidades específicas de sus clientes.

“Como seres humanos nos resistimos al cambio, pero si no cambiamos y nos adaptamos a las nuevas circunstancias, estamos condenados a perecer en sentido figurado y, a veces, literal”. Con estas palabras define el responsable de Last Mile de Dominion, José Beny López Piñeiro, la importancia de no quedarse rezagado ante la revolución impulsada por las tecnologías digitales, con los retos y oportunidades que se abren por igual

Para López Piñeiro el proceso de transformación digital es un concepto dinámico, en el que los límites entre productos y servicios se desdibujan, las barreras de entrada rígidas entre sectores se diluyen y se acortan de forma muy significativa las curvas de adopción tecnológica y de aprendizaje. Si algo define el momento presente es el ritmo acelerado al que se genera cada nueva tecnología y la rapidez con la que esas novedades caen en la obsolescencia.

“Los ciclos de adopción tecnológica se reducen y este fenómeno tiene impacto directo sobre el modelo de gestión empresarial porque las compañías tienen que tomar decisiones sobre cuándo y cómo invertir, desinvertir y reinvertir de forma mucho más rápida. El avance tecnológico es muy superior a la propia amortización de la inversión. La tecnología está sometiendo a fuertes tensiones financieras y de balance a las empresas”, asegura el experto.

 

Mirada global, enfoque selectivo

¿Y cómo se desenvuelve Dominion en este contexto? Ofreciendo un enfoque eminentemente práctico, que permita resolver los problemas concretos de los clientes, pero sin perder de vista la dimensión global inherente al proceso de transformación digital.

“Nuestro enfoque se basa en la adopción selectiva de la tecnología, adaptada completamente a las necesidades específicas de cada negocio, buscando una disminución de las barreras de entrada y salida. Se trata de un modelo que permite a nuestros clientes adaptarse de manera flexible a las necesidades y retos que imponen el medio y los mercados, sin permanecer cautivos de esa inversión y con un ROI y un ROA adaptados a la evolución de las empresas”, añade López Piñeiro.

Dominion aplica por tanto una digitalización selectiva de los procesos, en busca del mayor potencial de generación de eficiencia, poniendo el foco en la innovación y desarrollando e integrando herramientas y plataformas tecnológicas en diversos sectores estratégicos como la industria o las telecomunicaciones. El modelo de servicios desplegado por la compañía se orienta a la digitalización de aquellos procesos que sean clave para la productividad y rentabilidad de sus clientes.

“En Dominion trabajamos junto con el cliente, integrándonos en sus operaciones hasta donde el cliente juzgue conveniente, alineándonos con sus objetivos y aportando valor medido en términos de mejoras de la calidad, eficacia y eficiencia de sus procesos productivos. Planteamos un modelo integrado de prestación y gestión del servicio alineado con los objetivos estratégicos y tácticos de nuestros clientes”, asevera López Piñeiro.

Esta aproximación no tiene la misma adopción por sectores, ya que hay algunos que se han incorporado a esta nueva ola de outsourcing de servicios de manera más generalizada y sofisticación que otros. En concreto en el ámbito de las telecomunicaciones, los operadores han externalizado procesos de alto valor añadido, una tendencia que ha permitido a Dominion elevar su capacitación en la prestación de servicios de importancia crítica. 

“Se ha producido una evolución en el paradigma de la externalización de servicios que afecta de forma especialmente acusada al ámbito de las telecomunicaciones, en el que los operadores han externalizado aspectos clave, compartiendo así con sus proveedores áreas con alto potencial de generación de valor añadido, especialmente de cara al cliente final, algo que ha resultado muy beneficioso para nosotros”, según el experto. Sin embargo, curiosamente se está dando un fenómeno conducente a un retroceso de dicha tendencia, al menos en el sector de las telecomunicaciones, mientras que se abren otras oportunidades en otros sectores como el de la industria.

 

Las telecomunicaciones como modelo

El sector de las telecomunicaciones se caracteriza por la búsqueda de la satisfacción de sus clientes, ya que de ello depende la fidelización y permanencia de los usuarios en un mercado altamente competitivo y con altos niveles de penetración

Dominion presta servicios a diferentes operadoras de telecomunicaciones en mercados muy diferentes y se adapta a los requerimientos de este modelo de negocio tan demandante, circunstancia que le permite anticiparse a los requerimientos de otros sectores que en este momento no están tan avanzados.

“Ofrecemos nuestros servicios a diferentes operadoras a nivel internacional, por lo que tenemos la obligación de adaptarnos a un modelo de negocio de gran exigencia y para conseguirlo es vital diseñar una estrategia de digitalización que garantice los niveles de calidad y eficiencia exigidos por nuestros clientes en los principales procesos productivos que desarrollan”

José Beny López Piñeiro

José Beny López Piñeiro

| responsable de Last Mile

En este ámbito, Dominion cuenta con una plataforma de gestión integral que, partiendo de la interconexión con los sistemas existentes de sus clientes, permite, entre otras cosas, la automatización de los procesos de recepción y cierre de actividad, la optimización y consecuente aumento de la eficiencia en los procesos de asignación de trabajos a cada ingeniero de campo y el control en tiempo real de los diferentes indicadores de rendimiento establecidos por los clientes.

“En definitiva, este modelo de digitalización persigue la implantación de un ecosistema de gestión y optimización de procesos que permita interconectar a todas las partes y departamentos implicados”, concluye.